Dentro del hotel Presidente Intercontinental Santa Fe fue asesinado a tiros un joven originario de Sinaloa que llegó a la Ciudad de México y se registró con un nombre falso, que tenía más de cinco teléfonos celulares y que, sospechan ahora las autoridades, era sobrino del finado narcotraficante Luis Gabriel Valenzuela conocido como Grimaldi Paredes
Se trata de Juan Antonio Valenzuela Ortiz, aunque en su reservación y registro en el hotel, dijo llamarse Raymundo Moreno, según revelan los informes de la Fiscalía de Justicia de la Ciudad, dentro del expediente CI-FICUJ/CUJ-1/UI-1 C/D/0053/06-2020.
Las autoridades que indagan su homicidio sospechan que el tío de este joven era Luis Gabriel Valenzuela Valenzuela, quien fue considerado operador logístico y financiero de una red de narcotráfico y lavado de dinero ligada a Ismael “El Mayo” Zambada.
En febrero de 2018, ese hombre fue detenido por elementos del Ejército Mexicano en un fraccionamiento de Culiacán, Sinaloa, acusado de encabezar la emboscada contra un convoy militar en octubre de 2016, en la que murieron cinco soldados.
En julio de 2018, Valenzuela Valenzuela se fugó de prisión, pero días después fue asesinado.
Hace poco más de dos semanas, Juan Antonio Valenzuela Ortiz llegó a la Ciudad de México proveniente de Sinaloa.
Según los reportes de las autoridades fue la tarde del 31 de mayo cuando se registró en el Presidente Intercontinental. Su reservación se vencía este lunes. Estaba hospedado en el piso 13 del hotel. Su habitación era la 3304.
Las autoridades aún rastrean los movimientos que realizó desde su llegada. El personal del hotel aseguró que sólo lo veían entrar y salir, pero nunca lo vieron con nadie. Los agentes encontraron que tenía al menos cinco teléfonos celulares.
La noche del viernes lo mataron a tiros en uno de los pasillos del piso 13 del hotel.
Según los reportes, pasaban de las 21:00 horas cuando una recamarera escuchó algunos gritos en ese pasillo. La mujer contó que oyó a alguien tratando de abrir una de las habitaciones y luego vinieron tres gritos “no, no, no…”. Lo siguiente fueron tres detonaciones.
Cuando la recamarera se acercó, encontró al hombre sin vida. Estaba tendido en el piso, boca arriba.
El reporte médico detalla que presentaba al menos dos impactos de bala. Uno de ellos lo tenía en el tórax de lado derecho y el segundo en el hombro derecho a la altura de la clavícula.
El personal del hotel llamó a las autoridades. Les dijo que habían matado a un huésped y que se llamaba Raymundo Moreno.
Sin embargo, cuando la policía revisó sus cosas halló su pasaporte. Ahí descubrieron que su verdadero nombre era Juan Antonio Valenzuela Ortiz y que era originario de Sinaloa.
Hasta ayer, nadie se había presentado a reclamar su cuerpo. La Fiscalía de Justicia de la CDMX busca hallar a algún familiar para que les explique, qué hacía en la Ciudad el sinaloense. Sospechan que pudo venir para realizar algún negocio relacionado con actividades de narcotráfico.
Antecedente
Un hombre de 21 años de edad fue asesinado con impactos de arma de fuego dentro de un hotel en Santa Fe. Informes ministeriales señalan que el crimen tuvo lugar en el pasillo del Decimotercer piso, frente a la habitación 3304, donde se hospedaba desde el 31 de mayo. Información relacionada:
Asesinan a madre e hija en Coapa; sospechan de un familiar Agentes de investigación y peritos de la Fiscalía de Justicia capitalina, establecieron la identidad de la víctima mediante su registro en el hotel. Una de las recamareras explicó a los detectives que al realizar el aseo en dicha habitación, escuchó una discusión posteriormente tres detonaciónes de arma de fuego.
Al salir, encontró al huésped tirado, con múltiples heridas de bala y un cubrebocas puesto, sin signos vitales. Enseguida dio aviso a la gerencia del hotel y estaba su vez a los servicios de emergencia, cuyos paramédicos confirmaron el fallecimiento de este hombre, quien se encontraba hospedado solo.
Agentes de la Fiscalía de Homicidios recabó los principales indicios y retiró el cadáver para continuar con el proceso de identificación. Los detectives buscan en las imágenes de las cámaras de seguridad del hotel, así como las del C2 y C5 para identificar al o los agresores de dicha persona.