“Si voy en autobús y de plano nos topamos con un retén de Sicarios , prefiero tirar mi credencial de la Sedena al baño porque esos mugrosos no te perdonan que seas del Ejército” en Tamaulipas
El estado de Tamaulipas, donde recientemente se registró el secuestro de cuatro ciudadanos estadounidenses, es uno de los más violentos de todo México, debido a la guerra que libran en ese territorio los cárteles del Golfo y del Noreste por el control de la zona.
Asimismo, son frecuentes los choques armados entre miembros del ejército y convoyes de sicarios que circulan sin temor alguno por diversas carreteras y zonas urbanas de la entidad.
Incluso, pertenecer a las Fuerzas Armadas es prácticamente una sentencia de muerte para los militares que tienen su base de operaciones en Tamaulipas, por lo que deben tomar precauciones cuando se encuentran en sus días de descanso.
Así lo revelaron algunos elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) al ser entrevistados por el diario Milenio, en donde detallaron los riesgos que corren día a día en esa región.
Uno de los oficiales señaló, por ejemplo, que si andan en las calles vestidos de civiles, en centros comerciales, restaurantes o en aeropuertos, no acostumbran portar ningún documento que pruebe que pertenecen a la Sedena.
Esto se debe a que si son “interceptados” e “interrogados” por elementos del crimen como el cártel del Noreste o del Golfo, eso es casi una ruta segura para una muerte violenta, o peor aún, la desaparición con previos actos de tortura.
“Si voy en días de descanso a ver a mi familia a Ciudad Victoria o viajo a Laredo en autobús y de plano nos topamos con un retén del crimen organizado, prefiero tirar mi credencial de la Sedena al baño, o la lanzo por la carretera sin que se den cuenta, porque esos mugrosos no te perdonan que seas del Ejército”, indicó.
Otro militar declaró que la crueldad de los enfrentamientos ha provocado que varios de sus compañeros padezcan estrés post traumático. En ocasiones, la exposición a tanta violencia ha generado que algunos soldados reproduzcan actitudes agresivas con su propia familia.
Pero eso no es todo, pues en redes sociales circulan algunos videos de las humillaciones a las que los soldados fueron sometidos en lugares públicos, pues los sicarios suelen pintarlos como payasos, les pintan sus camionetas o incluso los amenazan a punta de pistola mientras los insultan.
Cabe señalar que, durante la presidencia de Andrés Manuel López Obrador, un total de 34 soldados han perdido la vida durante enfrentamientos con organizaciones criminales, y de estas víctimas 12 fallecieron en combates con los cárteles del Golfo y del Noroeste en Tamaulipas.