México. Yunuen tenía 10 meses cuando presenció el ataque en el que Fer, su mami perdió la vida. No pudo decir que su mami no se suicidó, su corta edad no le permitió estar consiente de lo que pasaba, mucho menos pudo ser testigo legal de este fatal hecho.
Apenas el 4 de enero de 2020, Fernanda cumplió 6 años de haber sido asesinada en Cuautitlán Izcalli, municipio del Estado de México, los mismos que de impunidad.
La vida de Yunuen cambio drásticamente, con la muerte de su mamá, también perdió la protección y el amor más auténtico que el ser humano puede poseer.
Fernanda Sanchez Velarde no se suicidó… La mataron.
¿Cuándo has visto que una muerta se destroce el rostro, se corte los brazos y sus rodillas tengan lesiones y luego se ahorque?
Fernanda tenía 18 años y muchas ganas de vivir, amaba a Yunuen y sentía un gran entusiasmo por su nuevo embarazo que apenas iniciaba. Era madre e hija, muy cariñosa, tenía planes de superación, pero sobre todo ganas de terminar con la persona que la hería verbalmente y físicamente; su esposo.
La noche de 4 de enero, se quedó la maleta hecha lista para partir. Fernanda pensaba dejar a su esposo, pues ya no quería esa vida de maltrato.
Para los padres de Fer, la vida se mutiló aquel día. Cuando vieron que el cuerpo de su única hija estaba abierto de piernas, con una de ellas estirada hacia el frente y la otra semiflexionada hacia atrás sobre el piso. Colgada de un lazo atado a una cadena. El rostro deforme por golpes, sus brazos con heridas profundas de varios centímetros y sus rodillas laceradas.
Han sido 6 años de lucha, 6 años en que su Yunuen ha crecido en un ambiente de violencia expuesta su vida por su padre, 6 años de amenazas y revictimización.
La violencia feminicida no solo mató a Fer. Sus otros dos hermanos varones murieron asesinados, para callarlos y limitarlos a seguir alzando la voz para exigir su derecho a una debida diligencia y un juicio apegado a derecho.
Magdalena y Roberto se quedaron sin hijos por la violencia, la impunidad y la corrupción de un sistema patriarcal y machista.
Quieren recuperar a su nieto Yunuen, salvarlo de ese ambiente, pero a pesar de haberle arrancado la vida a Fernanda las autoridades lo protegen.