La Rana y El Aquiles habrían dado la orden de acabar con "El Trebol" del Cártel de Los Arellano Félix, en su todo terreno llevaba la estampa con el símbolo de su apodo
La ciudad de Ensenada, Baja California, fue el escenario de una masacre ocurrida el pasado fin de semana durante un rally llamado Cachanillazo, en el cual 10 personas fueron asesinadas y nueve más resultaron heridas. Las investigaciones apuntan que en el ataque armado murieron personas relacionadas con la delincuencia organizada y el nombre de dos hermanos salió a la luz.
Ricardo Iván Carpio, fiscal general de Baja California, informó que el objetivo del ataque era un hombre presuntamente relacionado con el narcotráfico identificado como Alonso Arambula Piña, alias “El Trébol”. El funcionario agregó que el objetivo directo de esta agresión tripulaba el vehículo marcado con el número 15 y que tenía una estampa (símbolo) de un trébol”.
En la misma unidad todoterreno viajaba un funcionario de un municipio de la zona, identificado como José Eduardo Orozco Piña, quien también murió, así como Mariana Soto, pareja sentimental del capo, también abatida.
De acuerdo con medios locales como el semanario Zeta, “El Trébol” era un lugarteniente del Cártel de Sinaloa que sostenía una encarnizada disputa contra el Cártel de los Arellano Félix, organización criminal que históricamente ha dominado Baja California. Aún se investiga la relación entre el presunto sicario y el funcionario asesinado.
Sobre esta masacre, una fuente militar consultada por el diario Milenio reveló que Alfonso Arzate García, alias “El Aquiles”, y su hermano René, alias “La Rana”, serían los responsables de la agresión. Desde enero de 2015, la corte de San Diego ha señalado a los hermanos Arzate en denuncias formales de traficar toneladas de heroína, metanfetamina, cocaína y marihuana.
Incluso, la DEA y el FBI cuentan con fichas de captura por ambos hermanos, y una recompensa de 20,000 dólares para quien brinde información que ayude a su arresto.
Según informa Zeta, los Arzate se habían refugiado en Baja California, un territorio que le disputan a la facción del Cártel de Sinaloa encabezada por Ismael “El Mayo” Zambada, para lo cual se aliaron con Pablo Edwin Huerta Nuño, alias “El Flaquito”, uno de los principales operadores de los Arellano.
La masacre
Todo apunta a que el ataque que sacudió a Ensenada se trató de una disputa entre el Cártel de Sinaloa y el de los Arellano Félix (también conocido como Cártel de Tijuana). El atentado fue planeado, pues según el fiscal general de Baja california, “El Trébol” fue rastreado desde días antes por los sicarios.
La camioneta en la cual viajaban los asesinos, una Infinity Qx60 color negro, cuenta con reporte de robo en Estados Unidos desde el pasado 19 de abril. En la masacre fueron utilizadas 13 armas de fuego, incluidos dos de las conocidas como “cuerno de chivo”, así como cuatro armas cortas.
Medios locales reportaron que después de la agresión, fue colocado un narcomensaje en el que se leía: “De nuevo escondiéndose las manos los hermanos Arzate mandando a sus mugrosos rancheros y matando inocentes utilizando sus medios comprados para cambiar la información, pendiente que nosotros no nos equivocamos”, lo cual confirmaría su responsabilidad en la masacre.