Así viven habitantes de Culiacán tras la captura de Ovidio Guzmán, no quieren ni salir a la calle - El Diario Del Narco-Blog del Narco-Historias del Narco-El Blog del Narco-narcotraficoenméxico -->

Así viven habitantes de Culiacán tras la captura de Ovidio Guzmán, no quieren ni salir a la calle

- 9:38:00


Así viven habitantes de Culiacán tras la captura de Ovidio Guzmán, no quieren ni salir a la calle

Las noticias mostraban varias partes de Sinaloa en llamas, aquel jueves negro o “Culiacanazo 2.0” quedó grabado en la memoria de los mexicanos, el impacto fue tal que traspasó fronteras internacionales. El 2023 llevaba cinco días y se dejaba sentir su fuerza, el crimen organizado reaccionaba ante la captura de uno de sus líderes: Ovidio Guzmán, que además es hijo de una leyenda, Joaquín “El Chapo” Guzmán.

Si las imágenes y narraciones de lo sucedido resultaban brutales a miles de kilómetros de distancia, para quienes las vivieron en carne propia el hecho resultó devastador. Aquel 5 de enero despertaron y todo era un caos, parecía como si estuvieran en zona de guerra, las ráfagas no dejaban de sonar, los helicópteros sobrevolaban y en las redes sociales se reportaban los narcobloqueos e incendios, pero nadie sabía el por qué de la situación.

Aunado al miedo de lo que estaba ocurriendo, estaban la zozobra y la angustia de no saber la razón, poco a poco se desveló el misterio y se informó que en la sindicatura de Jesús María, en Culiacán, se logró la captura de Ovidio Guzmán. La sombra del “Culiacanazo” previo hizo más grande la llaga.

“El Ratón” fue llevado a la Ciudad de México, después al Penal del Altiplano en Almoloya de Juárez, Estado de México, y la calma se vislumbraba en el horizonte de Culiacán y sus alrededores, pero antes se esperaban todo tipo de escenarios, el terror vivido fue tal, que sigue presente en el lugar.

Al respecto, el semanario Proceso realizó un reportaje especial sobre la vida de los habitantes de Culiacán en la actualidad, tras la herida que dejó la captura de Ovidio. De acuerdo con el medio, las personas sienten miedo y angustia cada vez que un helicóptero del Ejército mexicano sobrevuela sus cabezas.

Ese mismo sentimiento lo tienen cuando ven los convoyes militares, pues los operativos no se fueron, por el contrario, se intensificaron en aras de la lucha contra el fentanilo. Elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) llenan las calles de Sinaloa, pero su presencia muchas veces revive los “Culiacanazos”.

Los habitantes viven con angustia, pánico y estrés, el cual no se va como se fue Ovidio, se queda como los operativos, como los militares, como la violencia generada por los cárteles.

 

Start typing and press Enter to search