Así se llevo acabo el velorio de "La Chuky" del Cártel del Golfo en Tamaulipas
Un enfrentamiento entre fuerzas de la Guardia Estatal de Tamaulipas y un grupo armado terminó con la muerte de cinco presuntos integrantes del crimen organizado, incluida una mujer conocida como “La Chucky”, una de las sicarias del Cártel del Golfo (CDG) a la que le gustaba presumir su vida criminal en redes sociales.
De acuerdo con el Diario de Chihuahua, los hechos se registraron el viernes 8 de noviembre durante un operativo de patrullaje en una brecha del municipio de Reynosa, zona conflictiva en la frontera norte de México.
Elementos de la Guardia Estatal detectaron una camioneta GMC Sierra con reporte de robo, cuyos ocupantes abrieron fuego. Los agentes repelieron el ataque y persiguieron a los agresores hasta que el vehículo chocó contra un poste de luz y se produjo un nuevo intercambio de disparos. En el lugar quedaron cinco personas muertas, entre ellas “La Chucky”.
Durante el operativo, las autoridades aseguraron seis armas largas calibre .223, 39 cargadores, cuatro chalecos tácticos, cuatro equipos de radiocomunicación y cuarenta “ponchallantas”.
No se registraron lesionados entre las fuerzas estatales. Toda la evidencia fue puesta bajo resguardo ministerial y se mantienen operativos en la zona, según la Secretaría de Seguridad Pública estatal.
Según información documentada en cuentas de dedicadas a compartir información de crimen organizado, la joven ganó notoriedad en distintas comunidades de San Fernando y Reynosa, al mostrarse públicamente armas y equipo táctico. Además, se dice que mantenía una relación sentimental con un presunto cabecilla del grupo criminal y que participaba en actividades de “halconeo”.
De acuerdo con información de medios locales, “La Chucky” habría fingido su muerte en 2019 para evitar ser capturada por las autoridades. Ese año, circuló el reporte de que había muerto junto a otros nueve integrantes de la organización, a raíz de una traición interna. Sin embargo, tiempo después la joven siguió activa en sus redes sociales, demostrando que seguía operando en Matamoros.
Su hermana Nayeli, conocida como “La Chata”, falleció en 2011. Se desconoce si ella tenía pasado criminal o si todo ocurrió a partir de este hecho.
La Chucky se mostraba en vehículos de lujo, armamento AK-47, música de narcocorridos, ramos buchones, y siempre mostrando su uniforme militar.
El caso de “La Chucky” ha reavivado la memoria de quienes siguieron el fenómeno de “Las Marucheras”, un grupo de jóvenes sicarias que alcanzaron notoriedad en el Cártel del Noreste (CDN).
Estas mujeres iniciaron labores como “halcones” y lograron ascender dentro del crimen organizado tras la detención o asesinato de líderes varones, consolidando su posición por sus propios medios en el 2019.
La denominación proviene de “Los Marucheros”, apodo asignado a los vigilantes de bajo rango que suelen consumir sopas instantáneas durante sus guardias en caminos y cruces de Tamaulipas. El grupo de “Las Marucheras” saltó a la atención pública cuando circularon videos en redes sociales donde, a bordo de camionetas, lanzaban amenazas a rivales y mostraban armamento de alto calibre.
Figuras como “La Güera” y “La Peque Sicaria” ilustran el fenómeno de una nueva generación de mujeres involucradas en el sicariato y el liderazgo criminal. “La Peque Sicaria” confesó detalles de su vida dentro del crimen organizado y sus actividades violentas luego de iniciar como “halcona”.