No se las perdonaron, van a pasar el resto de su vida en la cárcel de EU dos condenados por la muerte de 53 migrantes en un tráiler
A tres años del horror que estremeció a San Antonio, dos de los principales responsables del trágico suceso que cobró la vida de 53 migrantes han sido sentenciados este viernes a cadena perpetua en una prisión federal, según anunció el Departamento de Justicia de Estados Unidos.
Felipe Orduña Torres, conocido por los alias 'Cholo', 'Chuequito' o 'Negro', de 30 años, fue condenado a prisión de por vida, además del pago de una multa de 250.000 dólares. La justicia lo halló culpable de organizar el transporte ilegal de personas, lo que derivó en múltiples muertes y graves lesiones.
Junto a él, Armando González Ortega, de 55 años y apodado 'el Don' o 'Don Gon', recibió una condena de 83 años de cárcel, además de la misma sanción económica. Ambos fueron hallados culpables por un jurado federal en marzo de este año, por su implicación directa en el suceso ocurrido el 27 de junio de 2022.
Aquel día, un tráiler fue localizado abandonado bajo el sofocante calor de Texas, sin ventilación ni suministro de aire. En su interior yacían los cuerpos de 48 migrantes sin vida; cinco más fallecieron en hospitales locales. Entre las víctimas había seis menores y una mujer embarazada.
El juez federal Orlando García programó las sentencias justo en el tercer aniversario de la tragedia, una fecha que marcó un antes y un después en la lucha contra el tráfico de personas en EE.UU.
La fiscal federal Pamela Bondi expresó: “Estos criminales pasarán el resto de sus vidas tras las rejas por lucrarse con el sufrimiento humano. Este caso envía un mensaje claro a los traficantes: no cejaremos hasta verlos responder por sus crímenes”.
Durante el juicio, se reveló que los migrantes, provenientes de México, Guatemala y Honduras, pagaron entre 12.000 y 15.000 dólares por un viaje que terminó en tragedia. La Fiscalía también ordenó el decomiso de vehículos utilizados en la operación, además de casi 60.000 dólares en efectivo pertenecientes a los condenados.
El conductor del camión, Homero Zamorano Jr., se declaró culpable en enero, al igual que otros cinco implicados. En paralelo, Guatemala extraditó este año a Rigoberto Ramón Miranda Orozco, presunto cabecilla de una red de tráfico humano vinculada a este caso.