En las calles, cuando se platica con comerciantes, estudiantes, taxistas, hoteleros, empresarios, ciudadanos de a pie, la gran mayoría reconoce que se vive con más tranquilidad. De hecho el ambiente en las calles es muy distinto a años anteriores, cuando las balaceras eran cosa de cada día y la gente transitaba en estado de paranoia.
Y tenían razón para estar asustados, ya que de muchas maneras los criminales controlaban el estado: por ejemplo, un alto funcionario del gobierno estatal le revela que el jefe de plaza de unos de los cárteles en Piedras Negras (ese lugar donde han sido halladas decenas de narco fosas con cuerpos calcinados) tenía… su propio C4. Su propio centro de vigilancia con… 50 cámaras colocadas en sitios elevados por toda la ciudad (el gobierno muestra fotos y gráficas de su funcionamiento), como postes de luz y azoteas de casas y negocios.
El capo tenía acceso a las cámaras a través de una aplicación usada en su teléfono móvil y una tableta electrónica. No sólo contaba con un ejército de halcones, sino que él y sus principales lugartenientes sabían, en tiempo real, cuáles eran los desplazamientos de policías municipales, estatales y tropas federales, con lo cual podían huir en segundos, o preparar emboscadas no sólo contra los cuerpos de seguridad, sino contra miembros del cártel adversario.
Por eso el miedo ciudadano…
-Antes uno salía y nomás andaba viendo a dónde había una balacera, para saber si uno se iba por un lado u otro, o se daba la vuelta para tomar otra ruta, o si mejor se regresaba a su casa. Andaba uno venadeando todos los días y para todos lados para que no le tocaran las balas… -recuerda un chofer privado, quien reconoce que a sus hijos no los dejaba salir más que para ir las escuelas.
-Cuando uno ve a los GATES ya se siente más tranquilo porque ellos sí le meten a las armas. Son una bendición… -sintetiza una mujer comerciante la idea generalizada de que estos policías, uniformados de negro, con los rostros cubiertos, armados con poderosos fusiles y con vehículos blindados, se enfrentan sin chistar con cualquier grupo de sicarios que se topen, lo cual ha inhibido la presencia de delincuentes.
En el gobierno de Coahuila no tienen la menor duda de que los GATES han sido una buena decisión. El Comisionado Estatal de Seguridad, el capitán Hugo Eduardo Gutiérrez Rodríguez, quien estuvo en el Estado Mayor Presidencial con Ernesto Zedillo y Vicente Fox, no vacila en exaltar a estos policías de élite (nueve han caído en combate y cinco están reportados como desaparecidos) que han recibido adiestramiento de cuerpos especiales del Ejército, también de militares de España e Israel, ganan al menos $30 mil pesos mensuales, y se les ha dotado de viviendas. Además tienen un psicólogo dedicado a ellos y a sus familias por el stress constante en el que viven.
-Aquí se trataba de no dar tregua al crimen organizado. El GATE tiene capacidad, volumen de fuego, entrenamiento especializado por personal militar, por personal especialista en fuerzas especiales y operaciones especiales, operaciones de interdicción, combate urbano, defensa personal, y prácticas de tiro en situaciones de stress. Este grupo se forma en 2009 con 60 elementos. En la actualidad tenemos 215 elementos capacitados y adiestrados, más cerca de 200 que pertenecen al Grupo de Reacción Operativa Metropolitana (GROM), que administrativamente dependen de los municipios y operativamente los maneja el GATE a través de Comisión Estatal de Seguridad.
El capitán presume:
“A un niño tú le preguntas: “¿Qué quieres ser?”. Y antes te decían los niños, malamente, de tanta apología que se hizo del delito, te decían que querían ser sicarios. Ahora tú vas a las escuelas y le preguntas a un niño qué quiere ser y te dice: “Soldado, o GATE”.
SACRIFICAR LIBERTADES EN ARAS DE LA SEGURIDAD: “TODO AQUEL QUE TRAE DROGA, TIENE MANOS ASESINAS”
-¿Qué papel tuvieron los GATES para esta reducción de los índices delictivos?
-Más que importantes, yo siento que el GATE sería la médula espinal, o el punto neurálgico del combate al narcotráfico y la delincuencia organizada, que tienden a ser hegemónicos. Empieza vendiendo todo tipo de droga, después empiezan a controlar el famoso cobro de piso, a controlar la venta de alcohol, controlar los giros negros, controlar cuestiones de lavado de dinero, las maquinitas tragamonedas, secuestro. No es solamente la cuestión reactiva, sino cuestiones que tienen que ver con propuestas legislativas. La ley de uso de suelos no permite licencias para los table dance, para giros negros. No pueden presentarse personas desnudas o semidesnudas en espectáculos o en eventos de bares. No se pueden instalar casinos.
-¿Sacrificar ciertas libertades en aras de cortar el flujo financiero de esta gente?
-Exactamente, pero no se violentan ni se coartan las libertades de los ciudadanos. Esto nos ha permitido en algunos municipios reducir hasta 90% las muertes que se catalogan como violentas ocasionadas por accidentes de tránsito, relacionadas con la ingesta de bebidas alcohólicas. Después de las dos de la mañana ya no se puede vender ni puede haber establecimientos abiertos de venta de bebidas alcohólicas.
-Aquí había muchos líderes de Zetas. ¿Este es territorio libro de este cártel?
-Con certeza le puedo decir que ahorita ya no tenemos grandes capos de estos grupos criminales. Estamos combatiendo del cartel que sea, del grupo que se trate, estamos tratando de eliminar a su mínima expresión este flagelo para la sociedad. Para nosotros todo aquel que trae droga en la calle son manos asesinas que diezman a la humanidad, como nos diezman a nuestros hijos, que pueden caer en este problema.
-¿Combaten a todos?
-Trátese de quien se trate. Aquí les llamamos por su nombre. Y aquí no les tenemos miedo. Que sepan que Coahuila es un lugar donde impera el orden, impera la ley, e impera la fuerza del Estado.
-¿Qué significa llamarles por su nombre? –se le pregunta, en alusión de que usualmente nadie osa mencionarlos.
-Sea el grupo de los Zetas, o el grupo del Cártel del Golfo, o sea el grupo de la Familia Michoacana, porque hay algunos que dicen: “Los de la última letra” (hace tono burlón). Aquí les decimos por su nombre. Y como lo que son: delincuentes. Asesinos. Lacras de la sociedad.
-¿Por qué las casas decomisadas las destruyen? –se le pregunta acerca de las decenas de casas de capos que han derribado después de sus aseguramientos.
-A raíz de que se hacen aseguramientos y detenciones quedaron abandonadas, y pasan a ser nidos de maleantes o malvivientes, que las utilizan para consumir droga o delinquir, y eran un símbolo, una apología de la fastuosidad con la que ellos se sentían intocables. Se buscaron mecanismos adecuados legales para proceder a destrucción de las mismas…
“BIENVENIDOS AL INFIERNO”. Y A LAS OJIVAS QUE ZUMBAN…
Así le llaman al lugar donde se entrenan los GATES: el infierno. Así se aprecia un letrero colocado en su base de adiestramiento. Eso es debido a los entrenamientos extremos que reciben. Presenciamos algunos: prácticas de tiro con fusiles, trotes bajo el inclemente sol desértico, irrupción en laberintos subterráneos de tierra, avance en fosas con agua, y toma de un rancho. Gente de pocas palabras, los GATES, estos adictos a la adrenalina y al peligro.
Le dicen Ranger, tiene 25 años, dos en el GATE. Es ingeniero mecánico. Está trepado en un vehículo blindado adaptado para que en su parte alta viaje un artillero. Hoy es él. Lleva la cara cubierta con un pasamontañas como todos sus compañeros. Temen que los identifique el crimen organizado y arremeta contra ellos o sus familias.
-¿Qué te motivó para venir aquí? –se le pregunta.
-Ver en las calles las unidades negras (todas las unidades del GATE son de ese color, como el uniforme de sus elementos). Da orgullo verlas. Veía cómo estaban las calles de delincuentes y quería ayudar a limpiar esto. Eso fue lo que más me motivó. Ver que el GATE es el que estaba haciendo el cambio.
-¿Qué te decía tu familia, no se asustaron?
-Sí, me comentaron que era muy riesgoso, muy peligroso, que por qué no miraba otro trabajo, otra vocación, pero yo en mi interior quería ser GATE y cambiar esto. No me llamaba otra vocación.
-¿Estresante?
-Desde que amanece pides a Dios que te cuide. Sales con él y regresas con él. Es como un gusto a la adrenalina.
-Es un entrenamiento difícil de seis meses…
-No cualquiera puede lograr subirse a las negras. Es un adiestramiento muy pesado que no cualquiera llega a terminar.
-El arma una compañera fiel de ustedes…-se le comenta, ya que él y los suyos, como los militares, no la sueltan.
-Así es: esta es tu mujer (la toma fuerte). Tu armamento es tu mujer. Siempre te va a ser fiel. Nunca la debes de soltar, nunca la debes de abandonar. Es la que te va a salvar tu vida. Tú y el arma son juntos.
-Viven enfrentamientos, situaciones de riesgo…
-Sí, son topones (breves enfrentamientos con criminales), en los cuales escuchas las ojivas en tus oídos. Aquí te enseñan a controlar tus impulsos. A saber manejar el riesgo.
-Cuando pasan esas ojivas cerca, ¿qué sientes?
-Escalofríos más que nada, porque sientes que un centímetro más y pudiste haber sido tú. Controlarte es lo que te ayuda bastante.
-¿Cómo mantenerse tranquilos en medio de enfrentamiento?
-Es pensar, sentir las pulsaciones, calmarte, pensar en cosas tranquilas y tener visión. Tener visión del campo en el que estás trabajando. Y saber controlarte.
Tiene 29 años, seis meses en el GATE. Es una de las pocas mujeres que forman parte de este cuerpo de élite. Quiere llegar a ser comandante de grupo, como ya lo logró una de sus compañeras. Le llaman Roja, madre de tres hijos. Dice que la tratan igual que los hombres.
-Las mujeres aquí son tratadas igual que los hombres. Llevamos el mismo entrenamiento, el mismo cansancio, todo. Somos iguales. No hay distinción, no dispensan nada. La verdad el entrenamiento es muy pesado, dormimos muy poco, y todo el día es de esfuerzo. De esfuerzo físico.
-¿Tu familia te dijo que estabas loca por venir aquí?
-La verdad sí (se carcajea)…En un principio le tomó de sorpresa y no lo aceptó. Ya después de tanta insistencia logré que me apoyara. Mis hermanos me apoyaron mucho. Me dijeron que me viniera, que ellos iban a estar para cuidar de mis hijos mientras que yo me preparaba.
-¿No te da miedo?
-Sí me da miedo, me da preocupación, tengo dos niñas chiquitas y de repente sí me llega la angustia por ellas, pero me gusta esto. El estrés. Me encomiendo a Dios y como sé que tengo el apoyo de mi familia, cuando Dios lo decida, yo sé que mis hijos van a estar bien.
-¿Los combates?
-La verdad es que me da mucha emoción. Me gusta la adrenalina…
El Comisionado, el militar que en las calles porta una escuadra Glock y dos fusiles, uno Galil y uno Beretta, y que en su oficina exhibe fotos con Bill Gates o Tom Hanks, se ufana de los suyos. Pero, hay gente que no: hay personas que han denunciado sus excesos, algunos de los cuales han sido documentados por la Comisión de Derechos Humanos del estado.