Entrevista de Pepes office a El Rey Zambada, a El Mayo lo veo como un papá
Ismael “El Mayo” Zambada, líder y cofundador del Cártel de Sinaloa es uno de los hombres más buscados, pero parece imposible de encontrar, mientras él vive en la clandestinidad, alguien muy cercano a él, su hermano Jesús Reynaldo Zambada, alias “El Rey”, sufrió una violenta captura en la Ciudad de México, sobre ella y otras vivencias que tuvo en el mundo del narco dio una entrevista exclusiva a Pepe Garza.
Han pasado 15 años desde aquella detención, la vida de “El Rey” ha dado tantas vueltas que incluso ha participado como testigo en importantes juicios contra miembros del crimen organizado, como en el de Genaro García Luna, exsecretario de Seguridad de México, aunque no es lo único que ha cambiado, ahora también es compositor, pero la huella del narco sigue en él.
En la entrevista aparecieron nombres como el de Arturo Beltrán Leyva, Amado Carrillo, Armando Valencia y, por supuesto, su hermano; además habló de difíciles pasajes de su vida, algunos de los cuales ocurrieron ya estando en prisión.
La detención con orden de muerte
Aquel 20 de octubre de 2008 llegaron agentes a detener al “Rey”, no se identificaron y comenzaron a disparar, por ello Zambada le pidió a sus sicarios que no respondieran el fuego, sabía que iban de parte de Arturo Beltrán Leyva y que lo iban a matar, para evitarlo llamó a sus contactos en la Policía de la Ciudad de México, quienes enviaron agentes para protegerlo y salvarlo.
Pero aunque logró salvar su vida con su libertad no fue igual, quedó detenido, aunque no por voluntad de las autoridades, sino porque uno de los primeros hombres que acudió a su casa le tomó una foto para informar a Beltrán Leyva que estaba bajo su control, nada pudo hacer la corporación de la Ciudad de México.
Fue ingresado al penal de máxima seguridad del Altiplano, en Almoloya de Juárez, durante su estancia en dicho lugar dos de sus hijos fueron asesinados, al igual que uno de sus sobrinos.
La relación con “El Mayo”
Sobre su relación con Ismael Zambada destacó que siempre vio al capo como un padre, pues él quedó huérfano desde antes de cumplir dos años, pero su hermano se hizo cargo de él, no le da vergüenza decirle que lo ama aunque hayan pasado muchos años desde que lo vio por última vez.
Narró que fue el “Mayo” quien lo impulsó a estudiar una carrera universitaria, así lo hizo, hasta que fue pasante, pero las puertas laborales se le cerraban al saber de qué familia provenía, por esa razón se sumó a las filas del crimen organizado.
¿Murió el “Señor de los Cielos”?
Uno de los narcos más famosos que ha habido en México es Amado Carrillo Fuentes, mejor conocido como “El Señor de los Cielos”, su legado en el mundo del crimen organizado trascendió fronteras, pero su repentina muerte causó especulación, para muchos es solo una mentira para que el hombre pudiera andar libre por el mundo con su nuevo rostro. Por ello el entrevistador no desaprovechó la oportunidad y le preguntó si había muerto.
“Rey” respondió que ese día su hermano, “El Mayo”, le contó que Carrillo Fuentes había muerto y que las cosas sucedieron tal como se narraron en los medios de comunicación, pues “El Señor de los Cielos” tenía una afección cardiaca, lo que causó que su corazón se detuviera bajo el efecto de la anestesia que se le aplicó para cambiarle el rostro.
Habló sobre la amistad que tuvo con el capo, quien fue su compadre, hasta la fecha Jesús Zambada usa un reloj que perteneció a Amado Carrillo, que llegó a sus manos por la necesidad de un trabajador del “Señor de los Cielos”.
Las narcoayudas
Por otro lado y de manera personal, habló cómo él ayudó a las personas que trabajaron para él (en rubros legales), con fondos de ahorro hizo que cada quien tuviera sus autos, fortaleció empresas con las que varias familias llevaban sustento a sus casas. “Era lo que más disfrutaba de tener solvencia económica, cambiarle la vida a la gente”, explicó.
Agregó que en Navidad llevaba camiones cargados de juguetes, ropa y demás regalos para repartir, algo que dijo extraña mucho, al igual que las personas que los recibieron, quienes le piden que regrese, pero aseguró que ya no puede volver a México.
De capo a compositor
Cuando llegó al Altiplano encontró varios compañeros de prisión que afuera de ahí eran sus enemigos, pues dentro de aquel penal de máxima seguridad había personas de todos los cárteles. Vio llorar a algunos, él mismo se derrumbó cuando le informaron que sus hijos fueron asesinados, la prisión desnudó a los hombres más cruentos del mundo exterior y, aunque eran rivales, en reclusión vieron aquellos lados “débiles”, que en realidad eran humanos.
En su celda tuvo un compañero que lo enseñó a componer, Armando Valencia, quien era parte del Cártel del Milenio, escucharlo y verlo hacer algo diferente tras haber caído preso fue una inspiración para él, por lo que ahora compone sus propios narcocorridos.
“El Prisionero” es uno de los narcocorridos que “El Rey” Zambada interpreta junto a su Grupo Tosco, el tema es una crónica de la vida que tuvo en prisión, una “experiencia dura que no le desea a nadie”. Pero no es lo único que ha compuesto, incluso le compuso uno a Genaro García Luna, aunque por el momento no piensa hacerlo público.
Ahora espera que su música llegue a muchos lados, pero no descarta dedicarse a otra cosa, como ser conductor de taxi por aplicación.