Nuevo Laredo, Tamps., a 2 de enero del 2020.- Pese a que en la ciudad fronteriza de Nuevo Laredo se han registrado, durante tres días seguidos, ataques contra policías estatales y soldados, por parte de sicarios del Cártel del Noreste, desde el Gobierno federal no se ha hecho ningún pronunciamiento: Ni la Secretaría de Gobernación, la de Seguridad y Protección Ciudadana o las Fuerzas Armadas. Tampoco la Guardia Nacional –cuya misión es la “pacificación” del país– de la base de Nuevo Laredo y del estado de Tamaulipas, ha intervenido.
Hasta ayer miércoles, los enfrentamiento entre sicarios del Cártel del Noreste y policías estatales y soldados del Ejército, que se registran en Nuevo Laredo desde el martes, dejaron un saldo de nueve sicarios abatidos (tres el martes y seis ayer).
Hoy nuevos tiroteo han cobrado la vida de un agente estatal y lesionados han resultados tres más.
Ningún funcionario federal se ha pronunciado al respecto, ni ha hecho su aparición la tan presumida Guardia Nacional, que depende de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana a cargo de Alfonso Durazo Montaño y cuyo primer comandante es Luis Rodríguez Bucio, general de brigada del Estado mayor de México.
Se ha denunciado que pese a que se pidió el apoyo de la GN en repetidas ocasiones desde que comenzaron las agresiones, la comandancia en Nuevo Laredo y la coordinación estatal han hecho oídos sordos a los pedidos de ayuda.
Aunque en la región opera el 16 Regimiento de Caballería Motorizada de la Sedena, muchos de sus elementos han sido asignados a la Guardia Nacional, por lo que los militares han apoyado con una fuerza reducida a los policías, que han soportado los ataques recientes.
En tanto, el gobierno del estado ha condenado los ataques y señalado que no se bajará la guardia ante el crimen organizado, reconociendo el valor de su Policía.
Así, parecen ser ciertos los rumores que apuntan a que la Guardia Nacional tiene permiso del Ejecutivo federal de repeler agresiones, pero no de perseguir delincuentes.
Esto es sumamente grave, pues para integrar la Guardia Nacional, que cuenta actualmente con 58 mil 602 elementos desplegados en todo el país, fueron transferidos 56 mil 191 elementos de la Policía Militar, la Policía Naval y la Secretaría de la Defensa Nacional, mientras que otros dos mil 411 se han incorporado de la Policía Federal.
Aunado a esto, casi la mitad de los elementos de la Guardia Nacional (25 mil elementos) fueron desplegados en la frontera sur y norte, para frenar la migración ilegal, pero no así la delincuencia: Nuevo Laredo es muestra de ello.