El 24 de agosto de 2010, miembros de Los Zetas, uno de los grupos de narcotráfico más violentos que operaban en el noreste de México, raptaron y asesinaron a 72 migrantes en una vivienda abandonada en el municipio de San Fernando, Tamaulipas.
Tres días antes, el cártel había secuestrado los dos camiones donde viajaban 58 hombres y 14 mujeres a la frontera con Estados Unidos; después de atarlos y torturarlos, les dieron dos opciones: trabajar para la organización o morir.
Del grupo solo hubo dos supervivientes, uno de ellos fue el ecuatoriano Luis Freddy Lala Pomavilla, que 24 horas después de la masacre pudo llegar a un retén de la Marina donde pidió ayuda.
Para conmemorar el noveno aniversario de la masacre varias organizaciones de derechos humanos se reunieron en Saltillo, Coahuila.
Sus representantes dijeron que las políticas públicas del nuevo gobierno de México han vulnerado los derechos de los migrantes, y aseguraron que es por eso que sucesos como el de hace nueve años deben mantenerse en la memoria.
“Podemos y debemos frenar esta política de muerte, de discriminación. Cualquiera que sea su posición o color, el camino que están tomando es amargo”.
Pedro Pantoja, asesor religioso de la Casa del Migrante, comentó que con la masacre de San Fernando, además de que no ha existido una reparación de daños a familiares o una verificación del total de las víctimas, México demuestra que es un ‘cementerio de centroamericanos’.
El acto celebrado en Saltillo será el primero de catorce más que se llevarán hasta finalizar agosto en urbes de Guatemala y Honduras, así como en la Ciudad de México donde se seguirán discutiendo los temas de la masacre y de la memoria de las víctimas.
En lo que va de 2019, el flujo de migrantes incrementó en 232 por ciento con respecto a lo registrado en todo el 2018, pues se contabilizaron 460 mil ilegales que superan a los 138 mil 612 indocumentados que pasaron por territorio mexicano el año pasado; se trata de la cifra más alta jamás registrada en la historia del país en ese lapso.
De acuerdo con cifras dadas a conocer por el Instituto Nacional de Migración (INM), del total de personas que han ingresado a México, solo se presentaron ante esa instancia 99 mil 203 y han sido repatriadas 71 mil 110.