Pablo Escobar durante años ha sido comparado con Joaquín “El Chapo” Guzmán debido a que ambos fueron buscados por cielo, mar y tierra por dedicar su vida al narcotráfico además que los dos juntaron millones de dólares pero ahora otro hombre ha comenzado a ser comparado con ambos capos famosos, hablamos de Nemesio Oseguera, mejor conocido como “El Mencho”.
Mencho, líder del CJNG
Este hombre fundó el Cártel de Jalisco Nueva Generación -CJNG- el cual ha ganado terreno en la República Mexicana y ha desplazado a varios otros cárteles de droga que tenían ‘la plaza’ en diferentes estados.
Venta de diferentes drogas.
Pablo Escobar hizo su fortuna y construyó su imperio con la venta de la droga conocida como cocaína mientras que Joaquín Guzmán y Nemesio Oseguera han comercializado con diferentes tipos de droga, desde marihuana, cristal, heroína, cocaína, entre otros.
Otro de los puntos que tienen en comparación los tres narcotraficantes es que estuvieron en la cárcel. Pablo Escobar durante muchos años estuvo preso, El Chapo hasta la fecha sigue en prisión en Estados Unidos mientras que El Mencho también ha pisado la cárcel pero por poco tiempo (tan solo tres años).
Según datos del canal “El Mexa” de Youtube, la fortuna de El Mencho ronda los mil millones de dólares mientras que la fortuna de Pablo Escobar llegó a los 30 mil millones de dólares, sin embargo hay que destacar que el dólar no tenía el mismo valor en los años 70-80.
Dinero escondido
Aún así han sido capos que han rebasado los límites en cuestiones monetarias ya que ambos han tenido que esconder su dinero de maneras extravagantes como en hoyos en la tierra además que compran bienes raíces en miles de lugares para poder gastar el exceso de dinero.
Hay que recordar que Pablo Escobar estuvo entre los más ricos de Forbes durante siete años, desde 1987 hasta 1993. En 1989, fue elegido el séptimo hombre más rico del mundo.
Otro dato de Pablo Escobar es que su riqueza comenzó a ser un problema cuando no podía lavar el dinero lo suficientemente rápido. Entonces recurrió a ocultar el dinero en campos agrícolas colombianos, almacenes en ruinas y en las paredes de las casas de algunos miembros del cártel.