Caro Quintero es el narco de narcos, enemigo público y prófugo , Durante la década de los 80, Rafael Caro Quintero se posicionó como uno de los narcotraficantes más importantes de nuestro país.
Caro Quintero es el narco de narcos, enemigo público y prófugo
Junto a sus socios, Miguel Ángel Félix Gallardo y Ernesto Fonseca Carrillo, lideró el Cártel de Guadalajara. Su poderío llegó a ser tan grande que en 1984 torturó y asesinó a un agente de la DEA, delito por el que pasó 28 años en la cárcel.
Ascenso, Al igual que muchos narcotraficantes mexicanos, Caro Quintero, el Príncipe, nació en Badiraguato, Sinaloa en el seno de una familia de campesinos que sólo pudieron darle educación básica. De acuerdo con algunas versiones de su biografía, cuando le ofrecieron sembrar marihuana en el terreno que tenía su padre, no dudó en hacerlo.
Sus ingresos comenzaron a aumentar rápidamente y cultivó sus propias tierras. Todo lo que aprendió del negocio de las drogas se lo debe a Pedro Avilés Pérez y no pasó mucho tiempo antes de que se asociara con su tío, don Neto Fonseca Carrillo, y Juan José Esparragoza Moreno, el Azul.
La siguiente decisión de Caro Quintero fue comprar y poner a su servicio a tantos policías federales y estatales como le fue posible, para así consolidar al Cártel de Guadalajara. A la asociación se sumó Miguel Ángel Félix Gallardo, quien es conocido como uno de los primeros traficantes de cocaína en México, de acuerdo con la PGR.
Su error
Entre 1978 y 1984, Caro Quintero se ganó el título del “narco de narcos” por su nivel operativo. Sin embargo, y a pesar de su poderío, la DEA realizó un operativo en uno de sus presuntas propiedades, el rancho El Búfalo, en Chihuahua, donde le aseguraron cerca de mil toneladas de marihuana. Las autoridades mexicanas estiman que la pérdida económica fue de aproximadamente 8 mil millones de dólares.
No paró hasta dar con Enrique, Kiki, Camarena, agente responsable de tal golpe a su cártel. En febrero del año siguiente, Camarena y uno de sus pilotos fueron secuestrados, torturados y asesinados. En respuesta, el gobierno estadounidense desplegó el Operativo Leyenda para la búsqueda y captura del capo mexicano.
El Príncipe se vio obligado a huir con Sara Cosío, sobrina de quien entonces gobernaba Jalisco, hacia Costa Rica en donde fue aprehendido el 4 de abril de 1985 y extraditado a México para ser juzgado por narcotráfico y por el asesinato de un agente de la DEA.
Su descenso
Su poder adquisitivo, al momento de su arresto, fue valuado por la PGR en 100 mil millones de pesos de la época y se contaron alrededor de 40 casas en los estados en los que trabajaba, Sinaloa y Sonora, principalmente.
En 1989 fue sentenciado a casi 200 años de cárcel por secuestro, homicidio calificado, cultivo y transporte de marihuana, así como de tráfico de cocaína y asociación delictuosa.
Su sentencia se redujo a 40 años y, hasta 2007, permaneció en el Centro Federal de Readaptación Social del Altiplano, en el Estado de México, para luego ser recluido en Puente Grande y, posteriormente, pasó sus últimos tres años en el Reclusorio Preventivo del Estado de Jalisco.
De nuevo, en el ojo público
En el 2013 fue puesto en libertad por orden de un tribunal federal tras la obtención de una orden de amparo. De inmediato, la Procuraduría General de la República (PGR) giró una orden de aprehensión en su contra luego de considerar que aún debía de pagar 12 años en prisión; al tiempo que Estados Unidos solicitó su extradición al considerar que aún tiene que responder en ese país por el asesinato de Camarena Salazar.
Desde entonces, solo ha tenido dos apariciones públicas, la primera en 2016 cuando la periodista Anabel Hernández lo entrevistó para el semanario Procesoy este año, cuando se volvió a reunir con la misma periodista para platicar con él para HuffPost.
Actualmente, Caro Quintero está prófugo.