Culiacán, Sinaloa.- Para Rafael Caro Quintero era cuestión de vida o muerte dejar en claro que no tiene pleitos con ninguno de los cárteles.
Y que no estuvo detrás del ataque a la casa de Joaquín Guzmán Loera, “El Chapo”, comentó en entrevista con EL DEBATE, Anabel Hernández, De acuerdo con la periodista, quien cara a cara cuestionó a uno de los capos de la droga más importantes de México, fue él quien buscó la entrevista, pero realizarla no fue fácil, porque había cierta molestia en él de que lo hubieran relacionado con el ataque de La Tuna Badiraguato, ocurrido el pasado mes de junio, el cual de forma extraoficial se dijo que dejó muertos y un gran número de familias de desplazados.
Esta información publicada en Proceso, recordó, fue confirmada por el Ejército y la Fiscalía del estado de Chihuahua; y aunque Caro Quintero estaba molesto, en ningún momento ella se sintió amenazada ni intimidada. Lo más complicado fue que la primer intención de él no era “sí, vengan, grábenme”, pero se le dejó en claro que, si deseaba aclarar, tenía que ser en vivo y no por mensajes, ni por cartas, por lo que tenía que mostrar la cara.
Silencio
De acuerdo a Anabel, la imagen de Caro Quintero ha cambiado mucho desde que fuera liberado. Está muy delgado, trae el cabello café muy oscuro y no lo hubiera reconocido de haberlo visto en la calle. Por la apariencia que muestra, luce como un hombre entero de salud.
Además, cuando llegó a la cita, iba vestido de forma sencilla, no llevaba joyas. En el lugar no había avionetas ni helicópteros, ni toda esa parafernalia que suelen exhibir algunos narcotraficantes.
Durante el encuentro, él fue muy cuidadoso en decir que no estaba en guerra con nadie y manifestó su respeto para todas las familias. También eludió hablar de lo que era el Cártel de Guadalajara, así como de Ernesto Fonseca Carrillo y Miguel Ángel Félix Gallardo, lo que hace ver los pactos que hay entre estas personas, aunque estén en la cárcel.
“Aunque uno crea que no tienen ningún poder ni nada, claro que son pactos que no se rompen, que no se pueden romper”, detalló.
Otro de los temas en los que Caro Quintero guardó silencio fue sobre la red de complicidad que le permitieron tener el poder; por esta razón, a ella le quedó claro que hay pactos de silencio, de corrupción, que parecen intocables.
Estos pactos, aseguró, se tienen que romper, porque, de lo contrario, va a ser muy difícil combatir y acabar con la corrupción.
Temores
En el desarrollo de la entrevista para la periodista, fue evidente que Caro Quintero tiene temor y no está dispuesto a volver a la cárcel, lo cual considera injusto. También comentó que no tiene dinero, ni hombres, ni alianzas, como para emprender una guerra contra uno de los cárteles de la actualidad.
Anabel aseguró que la entrevista con Caro Quintero fue profesional, no hubo carne asada, agua, ni tequila, porque no fue reunión de amigos. Explicó que quienes escuchen y vean el video van a notar cómo a veces él se molesta y trata de ser evasivo.
Para ella, aseguró que es muy importante conocer qué tienen en la cabeza las personas como Caro Quintero, ya sea que sigan estando o no en el poder.
“Si uno analiza a Rafael Caro Quintero y luego se analiza a ‘El Chapo’, uno se queda pensando cómo una persona que estudió hasta primero de primaria pudo acumular tanto poder y, si uno compara el video, la personalidad del ‘Chapo’ Guzmán con la de Rafael Caro Quintero, es evidente que hay una clara diferencia de personalidades”.
Detalló que, aunque Rafael tiene muy poca educación e instrucción, es capaz de ser mucho más coherente, de tener más ideas con mucho más solidez y eso le hace pensar en la reunión que hubo entre ‘El Chapo’ Guzmán y ‘El Mayo’ Zambada con Rafael Caro Quintero, estando los tres prófugos en 2013.
“Me hace pensar en las razones de por qué ‘El Mayo’ Zambada y ‘El Chapo’ Guzmán van y se reúnen con él, con una especie de respeto; y eso me hace pensar que la figura de Caro Quintero esté o ya no esté en el narcotráfico, sigue siendo importante en ese mundo” concluyó.