Ciudad de México.- Una joven de 19 años de edad y su hermana de 16, vivieron por varios años encerradas en su casa por su propio padre, quien además abusaba sexualmente de ellas desde que tenían 6 años; incluso una de las muchachas resultó embarazada de su progenitor.
Pero la semana pasada, las muchachas decidieron huir y lo denunciaron antes las autoridades.
Las jóvenes vivían enclaustradas en sus habitaciones y solo se dedicaban a hacer la limpieza del inmueble que compartían con su padre y su violador, en la Colonia San Pedro Mártir.
Según el expediente FDS/FDS-1/UI-1-01/274/10-2016, las mujeres sufrían maltratos y desde años atrás no socializaban con nadie y vivían aterradas; cuando alguien preguntaba por ellas su padre decía que las había mandado a estudiar a otro estado del País, para no levantar sospechas.
Sin embargo, la de 19 años de edad salió embarazada y convenció a su hermana de que tenían que huir, pues temía que su padre le hiciera daño al bebé, ya que había intentado hacerla abortar.
Cuando pudieron escapar, las jóvenes acudieron con un conocido, a través del cual denunciaron el hecho ante la Fiscalía de Delitos Sexuales, de la Procuraduría General de Justicia Capitalina.
Su caso se volvió prioridad para la fiscal, Alicia Rosas Rubí, quien instruyó a su personal a proteger a las víctimas y darles atención psicológica, antes de que pudieran testificar.
Más tarde, agentes de Investigación ubicaron al padre y presunto violador. Lo vigilaron un par de días hasta que lo vieron arribar a su domicilio y lo detuvieron. Se trata de Ramiro Tapia Guzmán, de 49 años de edad, el cual de ser hallado culpable podría pasar hasta 50 años en prisión.
La joven de 19 años, su bebé y la menor de edad, estarán bajo resguardo de la Procuraduría Capitalina, hasta que existan condiciones para su reintegración social.