Lamentable tragedia ocurrió el día de ayer en la colonia Vicente Guerrero de Tampico, donde un bebé de un año y tres meses murió ahogado al caer en un registro del drenaje ubicado frente a la vivienda de sus abuelitos, lugar a donde había llegado de visita con sus padres.
Fue alrededor de las 11:30 horas cuando la central de emergencias C4 fue alertada que frente a la vivienda marcada con el número 615 de la avenida Las Torres, casi esquina con Segunda avenida de la mencionada colonia, un bebé de un año y 3 meses se había ahogado en un registro de drenaje.
Inmediatamente acudieron agentes investigadores de la PGJ, y personal de la Unidad Regional de Servicios Periciales, quienes al llegar fueron recibidos por paramédicos de la Cruz Roja, quienes los llevaron hacia donde se encontraba la madre, que tenía en sus brazos el cadáver de su pequeño.
Los primeros reportes indican que el menor tenía algunas horas de haber llegado de visita con sus padres a la casa de sus abuelos. La madre se retiró a trabajar y el padre se quedó platicando con sus familiares al interior de la vivienda pero en determinado momento en pequeño se salió al patio.
Poco después lo perdieron de vista y cuando no respondió a sus llamados salieron a buscarlo.
Fueron varios minutos de búsqueda, hasta que un tío del menor lo encontró sumergido en el registro del drenaje, ubicado cerca del domicilio, por lo que rápidamente lo sacó y solicitaron el auxilio de la Cruz Roja, pero cuando los paramédicos llegaron sólo confirmaron la muerte del bebé.
Momentos después al domicilio arribó la madre de menor, quien al ver el cuerpo inerte de su hijo, no daba crédito a lo sucedido ni a lo que el destino le tenía preparado.
“Hijo por qué no te cuidaron, yo andaba trabajando; por qué no lo cuidaron… por qué me lo quitas Dios mío”, exclamaba la desesperada madre, la cual tuvo que ser atendida por los paramédicos ya que entró en una crisis nerviosa.
Luego de que el personal de la PGJ realizara le correspondiente diligencia judicial, ordenaron que el cuerpecito fuera trasladado hacia la morgue, para que se le realizara la necropsia de ley.