ELLA LLEGÓ al CUARTEL a MORIR, LA TIROTEARON en PLENA AVENIDA en CULIACAN
En una ciudad devorada por la rutina de la violencia, donde las autoridades reparten estadísticas como pan seco y los soldados pasean su blindaje como si la guerra fuera desfile, se acaba de vivir otro episodio que confirma que la seguridad y la pacificación es solo una palabra bonita muy pronunciada en cualquier mañanera del gobierno de inutiles cuatritransformados.
El dia de ayer y frente al mismísimo cuartel militar y a unos pasos de la entrada del Complejo de Seguridad Pública de Culiacán, los balazos sonaron como siempre: ruidosos, despiadados,sangrientos y sin respeto por los límites del supuesto orden.
La escena: una mujer de 55 años, Patricia “A”, queda tendida en su Nissan March, visiblemente agujereado por impactos de balas, mientras una pareja que viajaba en otro vehículo no sabe ni cómo ni por qué les tocó bailar con la muerte.
Los atacantes, civiles armados en un Versa blanco y una motocicleta, hacen su jugada justo donde nadie se atrevería en un país “normal”: sobre la calzada Aeropuerto, frente a los ojos ciegos de los responsables de la seguridad de la ciudad sitiada, pero no protegida.
La conductora, herida, logra avanzar unos metros y pedir auxilio militar, solo para morir ahí mismo, en el que supuestamente es el lugar más seguro de la ciudad, pero ademas,no es la primera vez que ocurre,ni esta la única ciudad.
Las autoridades responden con el mismo guion: que “desplegaron apoyo inmediato”, que “buscan a los responsables”, que “se coordinan con cuerpos de emergencia”. Resultados: tres lesionados, una muerta, vehículos bañados en plomo y la ciudad con la misma jaqueca de siempre.
Así se va hilando el último “parte de guerra”: la muerte y el peligro ocurren en el perímetro que debería simbolizar seguridad. Y si uno busca entre los archivos y declaraciones institucionales, solo queda claro que el orden lo mide el conteo de cadáveres, no el blindaje militar o el número de decomisos sacados para la nota.
En otro caso reportado por NOROESTE,otra mujer murio en el hospital la tras resultar con múltiples heridas de bala tras un ataque armado en la colonia Rubén Jaramillo.
El fallecimiento fue reportado la tarde del mismo viernes, luego de algunas horas de terapia intensiva tras una larga operación.
La fallecida fue identificada con el nombre de Gisela “N” y había ingresado a cirugía luego de sufrir un ataque directo la mañana del viernes, cuando circulaba en su automóvil sobre la avenida Insurgentes, a la altura de la colonia Rubén Jaramillo.
Todo esto ocurre mientras en esta ciudades de Sinaloa e incluso el pais, la autoridad celebra arrestos tan solo para dorarle la píldora a ciudadanos mientras la muerte sigue paseando por calles,carreteras,brechas o avenidas, pero la realidad sigue apuntando con la pistola en la mano y matando con metralletas.