Lo habían dado por muerto desde Octubre pasado en un supuesto enfrentamiento en Culiacán, le gustaba andar de presumido y exhibiéndose el Holandés vinculado a El Mayo Zambada que fue encontrado misteriosamente muerto
Mataron a Marco Ebben, conocido como “El Holandés” durante el pasado 13 de febrero en Atizapán de Zaragoza, Estado de México. El narcotraficante neerlandés, quien mantenía fuertes vínculos con el cártel de Sinaloa y con Ismael “El Mayo” Zambada, fue abatido cuando se encontraba a bordo de su vehículo, al recibir al menos 15 disparos
Ebben, de 33 años, había llegado a México tras una exitosa carrera en el contrabando de drogas en Europa, donde era conocido por su participación en la distribución de cocaína proveniente de América del Sur hacia el continente europeo.
A lo largo de su carrera, el narcotraficante estableció conexiones con varios carteles, pero fue en 2023 cuando se asoció con “El Mayo” Zambada, buscando refugio y protección en las filas del cártel de Sinaloa.
El “Holandés” jugó un papel crucial en la expansión de la influencia de Sinaloa en Europa, coordinando operaciones de tráfico de drogas y armas entre ambos continentes. Además, se le atribuía la facilitación de redes criminales en el tráfico de sustancias ilícitas. Su relación con el cártel y su capacidad para operar con identidades falsas lo mantenían bajo el radar de las autoridades internacionales.
Poco tiempo antes de que mataran a “El Holandés”, en octubre de 2024, se había reportado su fallecimiento en un enfrentamiento en Culiacán, Sinaloa.
Sin embargo, los informes no confirmaron su deceso, y surgieron especulaciones sobre un posible intento de evadir la justicia y a sus enemigos mediante un falso reporte de muerte. Sin embargo, tras este acontecimiento, Ebben continuó operando de manera clandestina hasta ser localizado en Atizapán.
A su muerte, las autoridades encontraron en su posesión una identificación falsa de la DEA y una tarjeta oficial mexicana, lo que sugiere que el narcotraficante utilizaba identidades falsas para evitar su captura y continuar con sus actividades ilegales.
La muerte de Marco Ebben pone de manifiesto la complejidad y el alcance internacional de las operaciones del cártel de Sinaloa, así como los riesgos asociados con la colaboración entre organizaciones criminales de diferentes continentes.