Los Caballeros Templarios marcaron una etapa para las autoridades mexicanas
Uno de los grupos delictivos más sonados en la última época fue el Cártel de La Familia Michoacana, que al paso del tiempo se transformó en los Caballeros Templarios, grupos armados que tenían como sede las zonas de Morelos y Michoacán.
En su momento, este grupo delictivo llegó a ser el más buscado por las autoridades mexicanas por su alta peligrosidad, además de sus perturbadores métodos de iniciación que incitaban al canibalismo.
En entrevista para Reuters, Alfredo Castillo, quien en ese entonces era comisionado de seguridad de Michoacán, detalló algunos de los macabros rituales de los Caballeros Templarios hacia los miembros novatos.
En sus palabras el actual titular de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade) reveló que los novatos tenían que abusar, asesinar, descuartizar, cocinar y comer carne y órganos humanos, todo esto para demostrar su sentido de pertenencia con los Caballeros Templarios.
Parte de todo un proceso de iniciación tenía que ver desde descuartizar y a veces preparar propiamente el corazón”.
De acuerdo con las autoridades de Michoacán, este brutal y perturbador ritual, creado e impuesto por el líder de los Caballeros Templarios Nazario Moreno, también conocido como El Chayo; buscaba terminar con los infiltrados dentro de su organización delictiva.
A pesar de los múltiples enfrentamientos, Nazario El Chayo Moreno, pudo presumir ser el único líder criminal que fue abatido dos veces: el Gobierno de Felipe Calderón había afirmado que fue abatido; sin embargo, en 2012 fue desmentida esta información y fue hasta 2014 que fue asesinado por las fuerzas de seguridad mexicanas en un enfrentamiento en marzo de ese año.
Con información de Excélsior, Noticieros Televisa y RT en Español