Concordia, Sinaloa.- Más de una decena de vehículos del Ejército Mexicano, repletos de soldados, y al menos un par de helicópteros fueron vistos inspeccionando la sierra de Concordia, cerca de donde sucedió el ataque a sus instalaciones durante la tarde del viernes.
INICIAN LA BÚSQUEDA
Luego de que la Base de Operaciones fuera atacada, cientos de refuerzos arribaron al lugar con la finalidad de encontrar a los responsables del incidente, que le costó la vida a un cabo de infantería.
Al caer la noche, y una vez que paró la lluvia, varias unidades motrices fueron vistas circulando por los alrededores del área que se denomina La Presa.
Trascendió que los elementos castrenses han sido encomendados para encontrar todos los puntos de resguardo que mantendría el grupo armado que perpetró el ataque.
Mismo grupo, que sería el responsable de los hechos violentos que se han presentado en los últimos días, alrededor de la comunidad Pánuco, cerca de donde se encuentra la base de operaciones Cedro.
Vecinos de comunidades aledañas indicaron que los mismos helicópteros que escoltaron a las personas que regresaron hace unas dos semanas a sus hogares, luego de que huyeran por la violencia, serían los mismos que ahora buscaban a los presuntos gavilleros desde los aires.
Se desconocen los resultados que hasta el momento ha dado la pesquisa, pero se espera que la búsqueda continúe indefinidamente hasta que logre dar con todo el grupo.
Unidades del Ejército.
NO HAY LUGAREÑOS A LA VISTA
Durante la tarde del viernes, alrededor de 15 hombres armados llegaron hasta las instalaciones de una base de operaciones del Octavo Batallón de Infantería, y abrieron fuego contra los soldados.
Los militares repelieron la agresión, pero durante el tiroteo, el cabo de infantería Joaquín N resultó lesionado y falleció a los pocos minutos.
Luego de la refriega, los atacantes escaparon. Se adentraron en lo más profundo de la sierra, hasta donde llegaron los cientos de militares para realizar la búsqueda. Mientras los soldados realizan la pesquisa, la mayoría de los habitantes de Pánuco y los pueblos circunvecinos no han sido vistos. Se desconoce si se encuentran refugiados en sus hogares o decidieron abandonar de nueva cuenta el lugar.